lunes, 29 de enero de 2007

El Sector Crítico de CC.OO ante la Negociación Colectiva de 2007


EL SECTOR CRÍTICO DE CCOO RECLAMA PARA 2007 UNA NEGOCIACIÓN COLECTIVA QUE MEJORE LOS SALARIOS Y LAS CONDICIONES DE TRABAJO

Rechaza la renovación del ANC por empobrecer los convenios.

Ante el nuevo proceso de negociación emprendido por la patronal CEOE y los sindicatos CCOO y UGT, para abordar los criterios para la negociación colectiva de 2007, el Sector Crítico de CCOO quiere manifestar su posición ante un proceso que afectará en su empleo, salario, jornada, contratos y salud laboral a nueve millones de trabajadores.

1.Los trabajadores y trabajadoras deben mejorar su poder adquisitivo de forma importante. Participando, de esta manera, del crecimiento de la economía (más 3,5% del PIB), de los enormes beneficios empresariales (superiores al 20%) y recuperando las pérdidas de poder adquisitivo producidas en los últimos años. La estrategia de moderar salarios, unido a la precariedad en el empleo, consolida un modelo económico-empresarial poco competitivo al basarse en costes laborales baratos, lo que permite a los empresarios olvidarse de la inversión en I+D, del empleo de calidad y la cualificación profesional como factores de mejora de la productividad.

2. La calidad del empleo, la reducción de la jornada laboral y la mejora de las condiciones de trabajo siguen siendo objetivos pendientes en la negociación colectiva. Especialmente cuando estamos a la cabeza de la Unión Europea en precariedad en el empleo, somos el país con mayor índice de siniestralidad laboral y la jornada laboral es mayor (11 horas más al mes y 2 días menos de vacaciones que la media europea), según Eurostat. Un tema que deberían de aclararse los ángulos muertos de la reforma laboral última (por ejemplo, el concepto de "puesto de trabajo") para evitar que CEOE los use para que no sirva de nada en temas como el encadenamiento de los contratos en fraude de ley. También debería abordar la situación de los trabajadores inmigrantes. Pero no parece que nada de esto esté en la agenda del ANC.

3. No está justificada la firma de nuevos acuerdos de moderación salarial, basados en previsiones de inflación increíbles y que nunca se cumplen y unas cláusulas de revisión que no cubren a todos los trabajadores y que suponen prestar dinero a los empresarios. Los cinco Acuerdos para la Negociación Colectiva (ANC) que se han firmado anteriormente, desde su primera edición en 2002, han supuesto un empobrecimiento de los contenidos de los convenios y una pérdida de poder adquisitivo que se refleja en los datos siguientes. En 2004 la remuneración de los asalariados suponía el 47,71% de la riqueza nacional generada durante un año, dos años más tarde ha bajado hasta el 46,12%. Por el contrario, el excedente bruto de explotación -los beneficios- han pasado de representar un 41,78% al actual 42,25%, lo que significa un aumento de prácticamente medio punto del PIB. Si unimos estos datos a la evolución de los impuestos, se constata una enorme transferencia de rentas hacia el capital: en tan sólo dos años los asalariados han transferido a los empresarios rentas por valor de miles de millones de euros. Además los ANC no han frenado la perdida de capacidad de negociación y de poder sindical. Se han demostrado inútiles a la hora de mejorar los contenidos: empleo, contratación, reducción de jornada o poder de intervención sindical. Por ello, no se deberían repetir unos acuerdos que nacieron para evitar el intento del gobierno del PP de legislar una reforma de la negociación colectiva (Estatuto de los Trabajadores) y que los sindicatos han convertido de necesidad en virtud, a pesar de su carácter negativo para los trabajadores.

4. Exigencia de un amplio debate en toda la estructura del sindicato, y con las comisiones negociadoras sectoriales y de grandes Secciones Sindicales que tienen que negociar sus convenios en 2007, antes de firmar cualquier acuerdo. Las negociaciones que se realizan, por arriba y sin ningún tipo de participación de los afectados, suelen responder a los intereses de comodidad de los aparatos confederales, alejados de la realidad que viven los trabajadores y por tanto desconocedores de las necesidades que han de ser abordadas en una negociación colectiva que afecta a millones de trabajadores, tanto españoles como inmigrantes.

Madrid, 26 de enero de 2007

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